El Observatorio de Coyuntura Industrial (OCI) se reunió el pasado 25 de marzo. Además de los 16 clústeres, contó con la participación de la consejera de desarrollo económico, sostenibilidad y medio ambiente, Arantxa Tapia; y con el Lehendakari, Iñigo Urkullu.
Estas reuniones permiten a la industria vasca transmitir el estado del sector en los últimos 6 meses y sus previsiones para el próximo semestre al Gobierno Vasco. La anterior reunión, en abril de 2021, resaltó el optimismo de la industria vasca con un 80% de los clústeres manifestando que sus indicadores mejorarían en el próximo semestre. Siendo punto de preocupación el ritmo de vacunación.
Hasta el 24 de febrero, día en el que Ucrania fue invadida por Rusia, la mayoría de los sectores habían crecido y las previsiones apuntaban a que la mejoría seguiría. Sin embargo, la situación actual es de incertidumbre y prevén que se verán afectados sobre todo en la energía, las materias primas y la logística.
Seis de los 16 clústeres reunidos vieron empeorar sus previsiones para el próximo semestre. Si la situación se mantiene en el tiempo, es probable que los indicadores se vean empeorados. Sin embargo, confían en replicar ahora la resiliencia demostrada durante la pandemia, que les ha permitido aplicar protocolos y nuevas medidas ante una circunstancia excepcional.
Desde Basque Trade se ha publicado el Observatorio Internacional informe actualizado periódicamente para que las empresas pueden calcular el impacto que está generando la invasión a Ucrania.
Visión global de Euskadi
En su cartera de pedidos, mejoraban 9 de los 16 clústeres y un 40% esperaba continuar en esa misma línea y otro 40%, mantenerla.
En la facturación, el último semestre había crecido para el 80% de los sectores, y un 56% esperaba continuar subiendo y un 30% igualarla. Las exportaciones seguían una dinámica similar: el 75% de los clústeres habían apreciado un aumento en los anteriores seis meses, y para el futuro próximo un 50% confiaba en seguir creciendo y otro 50% en mantenerse.
El empleo también había subido y la previsión era optimista, con un aumento, aunque menos pronunciado. Por último, la I+D venía de un incremento sostenido y una perspectiva igualmente creciente.
El factor que mejor resiste a esta inestabilidad global es la I+D+i, cuyas inversiones se planifican a medio plazo y se mantienen sólidas.
El sector biosanitario
Este sector ha tenido un importante crecimiento en los últimos meses y espera seguir así en el semestre siguiente. Este crecimiento ocurre en todos los parámetros analizados. Su preocupación se centra en el marco regulatorio y, con la llegada del conflicto bélico en Ucrania, en los precios de las materias primas y los componentes, que ya habían experimentado incremento de precios y, en algunos casos escasez desde la crisis sanitaria de la Covid 19.
Además, sigue habiendo preocupación por la necesidad de encontrar talento y por transitar hacia la digitalización y hacia la producción ecológica.